VALORES DEL DAKAR
El espíritu del Dakar está en el cruce de varias pasiones. Además de ser un evento ineludible y fuera de normas en el mundo del deporte mecánico, es una experiencia humana única. La historia del rally, los esfuerzos de unos y los problemas de los otros, no dejan olvidar que el Dakar es ante todo un asunto de sentimientos y emociones. Es en esta dimensión, que los participantes se encuentran fuertemente unidos. Es eso que explica, por ejemplo, la supervivencia de la noción de ayuda al interior de la caravana.Una competencia deportiva de primer ordenMás que una simple carrera de velocidad, el Dakar exige capacidades de navegación fuera de pista, y calidades de regularidad. En rally raid, prima la resistencia y el menor error se paga caro. Esta mezcla de rigor físico y de exigencia técnica, seduce desde hace casi 30 años a campeones provenientes de diferentes horizontes, todos deseosos de confrontarse y medirse en esta prueba tan diferente. Ari Vatanen, ex campeón del mundo de los rallys WRC, encontró su fórmula ganadora; Stéphane Peterhansel, de ser un «toca todo» de excepción al comienzo de su carrera, se convirtió en el experto indiscutible; Cyril Despres, campeón del mundo de enduro, llegó al punto más alto del podio; Luc Alphand, campeón del mundo de ski, sobrepasó su aprendizaje del desierto ; Robby Gordon, el campeón americano de Nascar ; Yvan Muller, rey del hielo en una vida pasada, Carlos Sainz y, ahora, Carole Montillet o Guerlain Chicherit, todos ellos han buscado un objetivo: ganar el Dakar.Una experiencia humana fuera de lo comúnComo ocurre con la montaña o los océanos, los espacios abiertos inspiran a los «aventureros». Comprometerse en el Dakar, es de cierta manera escalar su propio Everest, finalizar la vuelta al mundo en vela o en remo. El podio de llegada representa un desafío de excepción, algunas veces el de toda una vida. Más allá de la clasificación, todos los participantes están motivados por este deseo tenaz, este sueño casi loco. Así sean pilotos de motos, autos o camiones, todos comparten esta ambición, un sentimiento que une. La tradición de ayuda mutua, palabra clave que hace parte de las bases del «espíritu Dakar», nace de esta pasión compartida. Todos hablan el mismo idioma.Una prueba internacional nómadaNacido en África, donde construyó su leyenda, el Dakar, es naturalmente atraído hacia lo desconocido. El descubrimiento de territorios, una de las razones de ser de esta prueba, lo lleva ahora a buscar nuevos rumbos. El Sahara fascinó a los participantes durante casi 30 años y será un punto de encuentro recurrente en el futuro. Por el momento, el Dakar se lanza a la conquista de otros continentes, con el deseo intacto de sorprender. Prueba international nómada desde siempre, el Dakar se apoya en la sed de intercambio, en la capacidad de apertura de sus participantes. Todos tienen ganas de explorar los desiertos del mundo.
LOS MOMENTOS FUERTES EN LA HISTORIA DEL DAKAR
La aventura comienza en 1977.
Thierry Sabine se pierde con su moto en el desierto de Libia, durante el recorrido del rally Abidjan-Niza. Salvado in extremis de entre las arenas, él regresa a Francia fascinado por los paisajes y decide compartir con otros su descubrimiento.
Es así que se inventa un recorrido saliendo de Europa. La ruta alcanzaría Alger, después pasaría por Agadez y se acabaría en Dakar.
El fundador le pone un lema a su creación: «Un desafío para aquellos que parten.
Un sueño para quienes se quedan ».
Gracias a una fuerte convicción y una brizna de locura, propias a las grandes ideas, el proyecto se concretiza rápidamente.
El París-Dakar, una competición diferente, abierta incluso a los sin títulos, y que conlleva un mensaje de apertura hacia el otro, llama la atención, sorprende y seduce.
A lo largo de casi 30 años, muchas historias deportivas y humanas se fueron escribiendo.1979 – Cita en el Trocadero La apuesta de Thierry Sabine se concretiza el 26 de diciembre de 1978: 182 vehículos se reúnen en la plaza del Trocadero para realizar un periplo de 10.000 kilómetros por terreno desconocido, dirección Dakar.
El encuentro entre dos mundos, buscado por el fundador de la prueba, se produce en el continente africano.
Entre los 74 pioneros que llegan a la capital senegalesa, Cyril Neveu, en una Yamaha 500 XT, abre el palmarés del más grande rally del mundo.1981 – Aventureros comunesEl París-Dakar conquista rápidamente al público, fascinado por esos aventureros comunes que desafían el desierto cada uno con sus métodos.
Las Yamaha y las Honda «arregladas en el garaje de la casa», se encuentran con la Rolls-Royce de Thierry de Montcorgé o el Citroen CX del piloto de 1, Jacky Ickx, acompañado de Claude Brasseur.
Hubert Auriol, ya conocido como «El Africano », gana su primer Dakar.1983 – Bienvenido en el Ténéré La primera visita al desierto del Ténéré maravilla y, al mismo tiempo, aterroriza.
La caravana se ve atrapada en una interminable tempestad de arena que desorienta a una cuarentena de pilotos. Y los más pérdidos invierten cuatro días en encontrar el camino.
La leyenda se pone en marcha.1986 – El año negroThierry Sabine, el cantante francés Daniel Balavoine, la periodista Nathaly Odent, el piloto rançois Xavier-Bagnoud, y el técnico de radio Jean-Paul Le ur, mueren en un accidente de helicóptero.
Las cenizas de Thierry Sabine fueron dispersadas en el desierto.
Su padre Gilbert, y Patrick Verdoy, toman las riendas. La carrera continúa, pero hay un vacío en el corazón. 1988 – Peugeot, entra en escena Más de 600 vehículos se encuentran en la salida, dada en Versailles. Peugeot, que se había lanzado a la aventura el año anterior, sale a la defensa de su título. Pero Ari Vatanen, que encabeza el rally en Bamako, es víctima de una desagrable sorpresa: su 405 Turbo 16 fue robada y cuando se la encuentra es demasiado tarde. Sin embargo, la marca del león logra imponerse, gracias a su compatriota Juha Ankunnen.1991 – « Peter », Primer ActoUn joven motociclista, vestido con una bandana azul, y quien había iniciado el rally tres años atrás, conduce su Yamaha hacia la victoria: este año se da comienzo al ciclo Stéphane Peterhansel.
Y en un cuatro ruedas, Ari Vatanen, el finlandés volante, alcanza su cuarto título de la categoría. Un récord aún a batir.1992 – Del norte al surEn esta edición excepcional, se les propone a los participantes una travesía del continente africano del norte hasta el extremo sur.
El París-El Cabo, cuenta con 22 etapas y visita 10 países, por una ruta de 12.427 kilómetros en total ! Hubert Auriol, vencedor junto con el navegador Philippe Monnet, se convierte en el prime piloto en inscribir su nombre en el palmarés de categorías moto y auto. 1995 – Viva EspañaPor primera vez, la salida no se da en Francia, sino en España, precisamente en Granada.
Hubert Auriol se convierte en el patrón del Dakar en el terreno y, de paso, presencia los resultados deportivos de Stéphane Peterhansel, quien obtiene su tercera victoria consecutiva.2000 – Un buggy azul en El CairoEl Dakar entra en el nuevo milenio con un recorrido trazado bajo el signo de la eternidad: la llegada se hace al pie de las piramides de Gizeh, donde descansan los faraones del Egipto antiguo.
Jean-Louis Schlesser, quien es el único vencedor del Dakar en buggy, conserva su título, al igual que Richard Sainct en su moto.2001 – Kleinschmidt, «Miss Dakar»Jutta leinschmidt, quien había aparecido en el Dakar trece años atrás en moto, en 1998 se había convertido en la primera mujer vencedora de una etapa, conduciendo un buggy Schlesser. Este año, es la primera en imponerse en Dakar, pero lo logra conduciendo una Mitsubishi.2005 – Une moto azul en la cimaEl motociclista Cyril Despres dedica su victoria a Richard Sainct, muerto algunas semanas atrás en el rally de los araones, y a abrizio Meoni.
Sus dos coequiperos de TM pagaron con su vida la pasión por el desierto, al igual que Juan Manuel Pérez, también víctima de una caída fatal.2007 – Peterhansel, poder 9231 motociclistas, 14 quads, 181 equipajes en coche y 85 camiones salen de Lisboa. A la llegada, el hombre de todos los terrenos, Stéphane Peterhansel, acumula ya nueve victorias en su palmarés del Dakar.
Luego de seis victorias en moto, él domina con la misma maestría la prueba sobre cuatro ruedas, sobrepasando a su coequipero Luc Alphand, y a sus rivales de la Volkswagen, Carlos Sainz y Giniel De Villiers.2008 – La seguridad como prioridadDespués del asesinato de cuatro franceses y de tres militares mauritanos, ocurridos en días precedentes a la salida y, respondiendo a las fuertes recomendaciones hechas por el Ministerio de Relaciones Exteriores de rancia en el sentido de no ir a Mauritania, la edición 2008 del rally es anulada. Las autoridades francesas habían descubierto amenazas terroristas que tenían el rally como objectivo. Así, la víspera de la salida, Etienne Lavigne, se ve obligado de anunciar la anulación de la edición 2008. Los participantes reunidos en Lisboa para las « verificaciones » encajan el golpe y apruebean la responsable decisión de las organizadores.
Tres semanas más tarde (viernes primero de febrero) un atentado en pleno corazón de Nouakchott confirmaba la pertinencia de la aplicación del principio de precautión.
BUSCADORES DE EMOCIONES
El competidor del Dakar no existe. En todo caso, es imposible reducirlo a un « tipo de modelo ». Entre un motociclista comprometido y sin asistencia, y un piloto profesional miembro de un equipo oficial, los medios y los objetivos son diferentes.
Provenientes de todos los continentes, evolucionando en los más variados sectores profesionales, los competidores tienen los valores como punto común.
Sin ser necesariamente unos guerreros, son sensibles a la idea de competición y saben juzgar la importancia de la apuesta. Sobre todo, su determinación los vuelve capaces de sacar recursos de dónde sea para alcanzar el objetivo previsto.
La realización del desafío personal, que puede ser el de un año o el de toda una vida, sigue siendo el motor de acción para los hombres del rally.
Auto...
Pasando por el coche más sencillo, a los buggies y al Hummer de hoy, la categoría auto ha conocido todas las excentricidades posibles.
El pelotón de los cuatro ruedas es el lugar más propicio a la creatividad y a la fantasía. Al mismo tiempo, para algunos participantes el hecho de participar en auto es optar por el camino de la sensatez, con la solidez y la fiabilidad del 4X4, que ya ha demostrado de qué es capaz.
Es también la ocasión de compartir las alegrías y los problemas teniendo un copiloto como cómplice. La velocidad promedio del vencedor 2007 : 91,3 km/h La velocidad promedio del último en clasificarse en 2007 : 36,5 km/h Número de equipajes en el Dakar 2007 : 181
Moto...
Es probablemente sobre las dos ruedas que la palabra «prueba» adquiere todo su sentido. Asumir solo la conducción, el pilotaje y la mecánica, otorga una dimensión heroica a la travesía del desierto.
Es este acto de valentía que buscan los motociclistas, conscientes de que un solo descuido es imperdonable, sea cual sea el terreno, lo largo de la especial, la hora del día o de la noche. Solitarios por naturaleza, su condición les conlleva a unirse: buscar una pista entre varios, compartir la gasolina o reparar sus máquinas en grupo, son actividades que hacen parte del cotidiano del motociclista del rally. La velocidad promedio del vencedor 2007 : 81,4 km/h La velocidad promedio del último en clasificarse en 2007 : 31,1 km/h Número de motos en el Dakar 2007 : 231
Quad...
No toca confiar en la imagen de confort que dan esas máquinas-híbridos : ¡motos de cuatro ruedas o coches con manubrio ! Si los quadistas ganan en estabilidad en comparación a los motociclistas, tienen que controlar un vehículo más pesado, lo cual hace que los esfuerzos sean aún más exigentes desde el punto de vista físico.
La velocidad promedio del vencedor 2007 : 58 km/h La velocidad promedio del último en clasificarse en 2007 : 44 km/h Número de quads en el Dakar 2007 : 14
Camión
En materia de espectáculo, los camiones siempre están presentes.
Impresionantes por su tamaño, también lo son por su agilidad tanto en las pistas como en las dunas. La rivalidad por el mejor puesto, sólo reposa en un reducido número de equipajes, pero la intensidad de la lucha le otorga a la competencia un sabor único.
Para muchos el desafío está en otro sitio : aquellos que tienen como misión de asegurar la asistencia rápida de uno o varios equipos. Encontrarse en el buen lugar al buen momento, es también primordial en el Dakar. Los «gruesos calibres» constituyen una pieza clave del dispositivo.La velocidad promedio del vencedor 2007 : 78,5 km/hLa velocidad promedio del último en clasificarse en 2007 : 36,5 km/hNúmero de motos en el Dakar 2007 : 85
El espíritu del Dakar está en el cruce de varias pasiones. Además de ser un evento ineludible y fuera de normas en el mundo del deporte mecánico, es una experiencia humana única. La historia del rally, los esfuerzos de unos y los problemas de los otros, no dejan olvidar que el Dakar es ante todo un asunto de sentimientos y emociones. Es en esta dimensión, que los participantes se encuentran fuertemente unidos. Es eso que explica, por ejemplo, la supervivencia de la noción de ayuda al interior de la caravana.Una competencia deportiva de primer ordenMás que una simple carrera de velocidad, el Dakar exige capacidades de navegación fuera de pista, y calidades de regularidad. En rally raid, prima la resistencia y el menor error se paga caro. Esta mezcla de rigor físico y de exigencia técnica, seduce desde hace casi 30 años a campeones provenientes de diferentes horizontes, todos deseosos de confrontarse y medirse en esta prueba tan diferente. Ari Vatanen, ex campeón del mundo de los rallys WRC, encontró su fórmula ganadora; Stéphane Peterhansel, de ser un «toca todo» de excepción al comienzo de su carrera, se convirtió en el experto indiscutible; Cyril Despres, campeón del mundo de enduro, llegó al punto más alto del podio; Luc Alphand, campeón del mundo de ski, sobrepasó su aprendizaje del desierto ; Robby Gordon, el campeón americano de Nascar ; Yvan Muller, rey del hielo en una vida pasada, Carlos Sainz y, ahora, Carole Montillet o Guerlain Chicherit, todos ellos han buscado un objetivo: ganar el Dakar.Una experiencia humana fuera de lo comúnComo ocurre con la montaña o los océanos, los espacios abiertos inspiran a los «aventureros». Comprometerse en el Dakar, es de cierta manera escalar su propio Everest, finalizar la vuelta al mundo en vela o en remo. El podio de llegada representa un desafío de excepción, algunas veces el de toda una vida. Más allá de la clasificación, todos los participantes están motivados por este deseo tenaz, este sueño casi loco. Así sean pilotos de motos, autos o camiones, todos comparten esta ambición, un sentimiento que une. La tradición de ayuda mutua, palabra clave que hace parte de las bases del «espíritu Dakar», nace de esta pasión compartida. Todos hablan el mismo idioma.Una prueba internacional nómadaNacido en África, donde construyó su leyenda, el Dakar, es naturalmente atraído hacia lo desconocido. El descubrimiento de territorios, una de las razones de ser de esta prueba, lo lleva ahora a buscar nuevos rumbos. El Sahara fascinó a los participantes durante casi 30 años y será un punto de encuentro recurrente en el futuro. Por el momento, el Dakar se lanza a la conquista de otros continentes, con el deseo intacto de sorprender. Prueba international nómada desde siempre, el Dakar se apoya en la sed de intercambio, en la capacidad de apertura de sus participantes. Todos tienen ganas de explorar los desiertos del mundo.
LOS MOMENTOS FUERTES EN LA HISTORIA DEL DAKAR
La aventura comienza en 1977.
Thierry Sabine se pierde con su moto en el desierto de Libia, durante el recorrido del rally Abidjan-Niza. Salvado in extremis de entre las arenas, él regresa a Francia fascinado por los paisajes y decide compartir con otros su descubrimiento.
Es así que se inventa un recorrido saliendo de Europa. La ruta alcanzaría Alger, después pasaría por Agadez y se acabaría en Dakar.
El fundador le pone un lema a su creación: «Un desafío para aquellos que parten.
Un sueño para quienes se quedan ».
Gracias a una fuerte convicción y una brizna de locura, propias a las grandes ideas, el proyecto se concretiza rápidamente.
El París-Dakar, una competición diferente, abierta incluso a los sin títulos, y que conlleva un mensaje de apertura hacia el otro, llama la atención, sorprende y seduce.
A lo largo de casi 30 años, muchas historias deportivas y humanas se fueron escribiendo.1979 – Cita en el Trocadero La apuesta de Thierry Sabine se concretiza el 26 de diciembre de 1978: 182 vehículos se reúnen en la plaza del Trocadero para realizar un periplo de 10.000 kilómetros por terreno desconocido, dirección Dakar.
El encuentro entre dos mundos, buscado por el fundador de la prueba, se produce en el continente africano.
Entre los 74 pioneros que llegan a la capital senegalesa, Cyril Neveu, en una Yamaha 500 XT, abre el palmarés del más grande rally del mundo.1981 – Aventureros comunesEl París-Dakar conquista rápidamente al público, fascinado por esos aventureros comunes que desafían el desierto cada uno con sus métodos.
Las Yamaha y las Honda «arregladas en el garaje de la casa», se encuentran con la Rolls-Royce de Thierry de Montcorgé o el Citroen CX del piloto de 1, Jacky Ickx, acompañado de Claude Brasseur.
Hubert Auriol, ya conocido como «El Africano », gana su primer Dakar.1983 – Bienvenido en el Ténéré La primera visita al desierto del Ténéré maravilla y, al mismo tiempo, aterroriza.
La caravana se ve atrapada en una interminable tempestad de arena que desorienta a una cuarentena de pilotos. Y los más pérdidos invierten cuatro días en encontrar el camino.
La leyenda se pone en marcha.1986 – El año negroThierry Sabine, el cantante francés Daniel Balavoine, la periodista Nathaly Odent, el piloto rançois Xavier-Bagnoud, y el técnico de radio Jean-Paul Le ur, mueren en un accidente de helicóptero.
Las cenizas de Thierry Sabine fueron dispersadas en el desierto.
Su padre Gilbert, y Patrick Verdoy, toman las riendas. La carrera continúa, pero hay un vacío en el corazón. 1988 – Peugeot, entra en escena Más de 600 vehículos se encuentran en la salida, dada en Versailles. Peugeot, que se había lanzado a la aventura el año anterior, sale a la defensa de su título. Pero Ari Vatanen, que encabeza el rally en Bamako, es víctima de una desagrable sorpresa: su 405 Turbo 16 fue robada y cuando se la encuentra es demasiado tarde. Sin embargo, la marca del león logra imponerse, gracias a su compatriota Juha Ankunnen.1991 – « Peter », Primer ActoUn joven motociclista, vestido con una bandana azul, y quien había iniciado el rally tres años atrás, conduce su Yamaha hacia la victoria: este año se da comienzo al ciclo Stéphane Peterhansel.
Y en un cuatro ruedas, Ari Vatanen, el finlandés volante, alcanza su cuarto título de la categoría. Un récord aún a batir.1992 – Del norte al surEn esta edición excepcional, se les propone a los participantes una travesía del continente africano del norte hasta el extremo sur.
El París-El Cabo, cuenta con 22 etapas y visita 10 países, por una ruta de 12.427 kilómetros en total ! Hubert Auriol, vencedor junto con el navegador Philippe Monnet, se convierte en el prime piloto en inscribir su nombre en el palmarés de categorías moto y auto. 1995 – Viva EspañaPor primera vez, la salida no se da en Francia, sino en España, precisamente en Granada.
Hubert Auriol se convierte en el patrón del Dakar en el terreno y, de paso, presencia los resultados deportivos de Stéphane Peterhansel, quien obtiene su tercera victoria consecutiva.2000 – Un buggy azul en El CairoEl Dakar entra en el nuevo milenio con un recorrido trazado bajo el signo de la eternidad: la llegada se hace al pie de las piramides de Gizeh, donde descansan los faraones del Egipto antiguo.
Jean-Louis Schlesser, quien es el único vencedor del Dakar en buggy, conserva su título, al igual que Richard Sainct en su moto.2001 – Kleinschmidt, «Miss Dakar»Jutta leinschmidt, quien había aparecido en el Dakar trece años atrás en moto, en 1998 se había convertido en la primera mujer vencedora de una etapa, conduciendo un buggy Schlesser. Este año, es la primera en imponerse en Dakar, pero lo logra conduciendo una Mitsubishi.2005 – Une moto azul en la cimaEl motociclista Cyril Despres dedica su victoria a Richard Sainct, muerto algunas semanas atrás en el rally de los araones, y a abrizio Meoni.
Sus dos coequiperos de TM pagaron con su vida la pasión por el desierto, al igual que Juan Manuel Pérez, también víctima de una caída fatal.2007 – Peterhansel, poder 9231 motociclistas, 14 quads, 181 equipajes en coche y 85 camiones salen de Lisboa. A la llegada, el hombre de todos los terrenos, Stéphane Peterhansel, acumula ya nueve victorias en su palmarés del Dakar.
Luego de seis victorias en moto, él domina con la misma maestría la prueba sobre cuatro ruedas, sobrepasando a su coequipero Luc Alphand, y a sus rivales de la Volkswagen, Carlos Sainz y Giniel De Villiers.2008 – La seguridad como prioridadDespués del asesinato de cuatro franceses y de tres militares mauritanos, ocurridos en días precedentes a la salida y, respondiendo a las fuertes recomendaciones hechas por el Ministerio de Relaciones Exteriores de rancia en el sentido de no ir a Mauritania, la edición 2008 del rally es anulada. Las autoridades francesas habían descubierto amenazas terroristas que tenían el rally como objectivo. Así, la víspera de la salida, Etienne Lavigne, se ve obligado de anunciar la anulación de la edición 2008. Los participantes reunidos en Lisboa para las « verificaciones » encajan el golpe y apruebean la responsable decisión de las organizadores.
Tres semanas más tarde (viernes primero de febrero) un atentado en pleno corazón de Nouakchott confirmaba la pertinencia de la aplicación del principio de precautión.
BUSCADORES DE EMOCIONES
El competidor del Dakar no existe. En todo caso, es imposible reducirlo a un « tipo de modelo ». Entre un motociclista comprometido y sin asistencia, y un piloto profesional miembro de un equipo oficial, los medios y los objetivos son diferentes.
Provenientes de todos los continentes, evolucionando en los más variados sectores profesionales, los competidores tienen los valores como punto común.
Sin ser necesariamente unos guerreros, son sensibles a la idea de competición y saben juzgar la importancia de la apuesta. Sobre todo, su determinación los vuelve capaces de sacar recursos de dónde sea para alcanzar el objetivo previsto.
La realización del desafío personal, que puede ser el de un año o el de toda una vida, sigue siendo el motor de acción para los hombres del rally.
Auto...
Pasando por el coche más sencillo, a los buggies y al Hummer de hoy, la categoría auto ha conocido todas las excentricidades posibles.
El pelotón de los cuatro ruedas es el lugar más propicio a la creatividad y a la fantasía. Al mismo tiempo, para algunos participantes el hecho de participar en auto es optar por el camino de la sensatez, con la solidez y la fiabilidad del 4X4, que ya ha demostrado de qué es capaz.
Es también la ocasión de compartir las alegrías y los problemas teniendo un copiloto como cómplice. La velocidad promedio del vencedor 2007 : 91,3 km/h La velocidad promedio del último en clasificarse en 2007 : 36,5 km/h Número de equipajes en el Dakar 2007 : 181
Moto...
Es probablemente sobre las dos ruedas que la palabra «prueba» adquiere todo su sentido. Asumir solo la conducción, el pilotaje y la mecánica, otorga una dimensión heroica a la travesía del desierto.
Es este acto de valentía que buscan los motociclistas, conscientes de que un solo descuido es imperdonable, sea cual sea el terreno, lo largo de la especial, la hora del día o de la noche. Solitarios por naturaleza, su condición les conlleva a unirse: buscar una pista entre varios, compartir la gasolina o reparar sus máquinas en grupo, son actividades que hacen parte del cotidiano del motociclista del rally. La velocidad promedio del vencedor 2007 : 81,4 km/h La velocidad promedio del último en clasificarse en 2007 : 31,1 km/h Número de motos en el Dakar 2007 : 231
Quad...
No toca confiar en la imagen de confort que dan esas máquinas-híbridos : ¡motos de cuatro ruedas o coches con manubrio ! Si los quadistas ganan en estabilidad en comparación a los motociclistas, tienen que controlar un vehículo más pesado, lo cual hace que los esfuerzos sean aún más exigentes desde el punto de vista físico.
La velocidad promedio del vencedor 2007 : 58 km/h La velocidad promedio del último en clasificarse en 2007 : 44 km/h Número de quads en el Dakar 2007 : 14
Camión
En materia de espectáculo, los camiones siempre están presentes.
Impresionantes por su tamaño, también lo son por su agilidad tanto en las pistas como en las dunas. La rivalidad por el mejor puesto, sólo reposa en un reducido número de equipajes, pero la intensidad de la lucha le otorga a la competencia un sabor único.
Para muchos el desafío está en otro sitio : aquellos que tienen como misión de asegurar la asistencia rápida de uno o varios equipos. Encontrarse en el buen lugar al buen momento, es también primordial en el Dakar. Los «gruesos calibres» constituyen una pieza clave del dispositivo.La velocidad promedio del vencedor 2007 : 78,5 km/hLa velocidad promedio del último en clasificarse en 2007 : 36,5 km/hNúmero de motos en el Dakar 2007 : 85
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